¿EL APRENDIZAJE SE PUEDE VER AFECTADO POR PROBLEMAS DE SUEÑO Y/O ALTERACIONES VISUALES?
La capacidad de procesar información visual es crucial para el aprendizaje de los niños. Cuando los niños tienen dificultades como la dislexia, el trastorno del espectro autista, a menudo presentan dificultades en el procesamiento visual. Afortunadamente, hay muchas estrategias de entrenamiento visual que los padres y los educadores pueden utilizar para ayudar con estos problemas.
El entrenamiento visual implica el uso de ejercicios y técnicas que mejoran la capacidad de los niños para procesar y comprender la información visual. Algunas de las estrategias de entrenamiento visual incluyen:
- Ejercicios de seguimiento visual: estos ejercicios consisten en fijar y seguir objetos en movimiento con los ojos. Los niños pueden mejorar su capacidad para seguir el texto al leer al realizar este tipo de ejercicios.
- Juegos de discriminación visual: estos juegos ayudan a los niños a distinguir las diferencias entre objetos y formas. Por ejemplo, pueden comparar dos imágenes y encontrar las diferencias entre ellas.
- Ejercicios de memoria visual: estos ejercicios ayudan a los niños a recordar la información visual. Por ejemplo, pueden estudiar una imagen y luego tratar de recordarla de memoria.
- Ejercicios de percepción visual: estos ejercicios ayudan a los niños a identificar patrones visuales y relaciones espaciales. Por ejemplo, pueden trabajar en la comprensión de conceptos espaciales, como “encima” y “debajo”.
Además de estos ejercicios, es importante procurar que la calidad del sueño sea óptima ya que esto está relacionado directamente con algunas dificultades de aprendizaje. La falta de sueño puede afectar negativamente el aprendizaje, el rendimiento académico y el procesamiento cognitivo.
Las alteraciones del sueño, como el insomnio y los trastornos respiratorios del sueño (como roncar), pueden tener un efecto significativo en la capacidad de los niños para procesar la información visual y aprender. Los estudios han demostrado que los niños con trastornos del sueño tienen un rendimiento académico inferior y más dificultades de aprendizaje que los niños que duermen adecuadamente.
Para asegurarse de que los niños estén durmiendo lo suficiente, es importante establecer una rutina de sueño regular y asegurarse de que el ambiente de sueño sea cómodo y tranquilo. Además, los padres deben estar atentos a los signos de trastornos del sueño y buscar tratamiento si es necesario.
En resumen, el entrenamiento visual puede ser una herramienta efectiva para ayudar a los niños con problemas de aprendizaje a mejorar su capacidad para procesar y comprender la información visual. Sin embargo, también es importante asegurarse de que los niños estén durmiendo lo suficiente y de estar alertas para el manejo de cualquier trastorno del sueño, en caso de necesidad, que pueda estar afectando su aprendizaje. Al trabajar en estas dos áreas en conjunto, los padres y los educadores pueden ayudar a los niños a alcanzar su máximo potencial cognitivo.
Los invitamos a escuchar a las Dras Karen Herrera, fisioterapeuta, especialista en sueño, de Neumocare, y Marcela Camacho, Ortoptista, experta en entrenamiento y terapia visual, de Eyebix Peformance hablando del tema en el siguiente link
problemas de aprendizaje relacionados con alteraciones del sueño o alteraciones visuales